Quizás esto de hoy no sea muy largo, quizás no sea yo tan elocuente, quizás ni sé que decir, lo que si se es que no deja de estar lleno de ganas, aunque también de dudas. Y las redes a veces te inundan y te dicen cosas que no quieres oír, he visto mil videos que cuestionan la cosa reciproca, la cosa de que si te escriben o de si solo responden.
No sé si es falta de iniciativa, no sé si es falta de compromiso, si es miedo al abismo que representa el compartir estos espacios que la vida nos otorga, no lo se. Quizás solo sé que hay momentos como este, momentos que, aunque estén llenos de dudas, el impulso por escribir o escribirle, -no lo sé-. Es irrefrenable.
Me leo y estoy lleno de “no sé” , pero no importa, por primera vez en la vida no espero una respuesta, es que creo que sé que en fondo que su respuesta nunca llegara, pero no importa, por primera vez me soy suficiente, no necesito sus respuestas, no necesito su aprobación y menos su validación, me siento bien, de ella necesito otra cosa. Este último es para mí, para solo recordarme que aprendí a ser otro, que ya no soy el mismo, que no espero lo mismo, que no le tengo miedo a este espacio porque soy libre, porque no debo, porque todo se basa en la capacidad de dar, de entregar absolutamente
todo y en la contención que hay detrás de eso. Que no se te olvide nunca Luis.
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